La muestra despliega una instalación para los tres ambientes que conforman la galería. Desde la observación de las grietas que quiebran el cemento del suelo de las salas, Camila Lobos Díaz traza un recorrido para observar aquellos espacios vacíos que interrumpen la ciudad y su lógica de propiedad.
La propuesta expositiva desarrollada por la artista visual Camila Lobos Díaz para la Galería Concreta del Centro Cultural Matucana 100 aborda una reflexión sobre la enigmática relación que surge de los intersticios inesperados que llenan la sala y que, a otra escala, encontramos repartidos por la ciudad. Partiendo desde la propia estructura de la galería, la artista realiza tres momentos consecutivos que toman en cuenta los rasgos propios del cemento agrietado que se forma en la sala de acceso.
Para resaltar la observación de esos quiebres inesperados que se reparten por el suelo de la galería, la primera instalación forma un laberinto de hilos transparentes dispuestos de suelo a cielo. La escena que los visitantes podrán encontrar ahí propone un recorrido que los guía a una de las paredes de la sala desde la cual se puede entrever el diorama central que da nombre a la exposición: Del espacio quebrado.
Encerrado en el centro de la galería, un sitio eriazo busca replantear la forma silvestre de estos lugares agrestes que se forman como ejemplos de una manifestación no controlada de la naturaleza. Observando a través de una pandereta perimetral, la visión del espacio central invierte la marginalidad de los sitios abandonados de la ciudad y pregunta por el sentido que cobra la tierra, en una sociedad marcada por un régimen de propiedad del suelo.
En una tercera instalación de cierre, el desplazamiento de las grietas hacia lo alto de la última sala, acentúa la idea de un desplazamiento en vertical por las distintas capas que forman la corteza terrestre. “Nuestra forma de entender el suelo como aquella superficie que nos soporta, nos lleva a olvidar la existencia de una conformación subterránea que sustenta la vida sobre el planeta. La tierra no solo es un horizonte, sino una forma de profundidad. Cuando recordamos eso -y las grietas nos permiten verlo- nuestro concepto de los límites del mundo se modifican”, señala la artista.
La investigación mantenida por la artista Camila Lobos Díaz a lo largo de su trayectoria se ha interesado por los límites geopolíticos y las formas de exclusión que se imponen. En esta nueva propuesta, su interés apunta también a la problemática configuración política que marca nuestro régimen de propiedad del suelo. El límite es incluso más político y sensible cuando se trata de ver aquellos espacios de la polis que permanecen como señal de la postergación de la relación con la naturaleza.
“Un sitio eriazo es un desafío al orden establecido que nos vuelve a recordar la parcialidad de nuestras formas de vida en la ciudad. Lo que ahí se gesta, uno podría pensar, es un vergel con malezas y variedades interdictas; una minúscula cárcel de especies naturales sometidas por el régimen de propiedad”, señala el curador Pedro Donoso.
¿CUÁNDO? Del 28 de agosto al 06 de octubre Inauguración: 27 de agosto 2024 - Mié a vie: 12 a 21 hrs - Sáb: 16 a 21 hrs - Dom: 16 a 20 hrs ¿DÓNDE? Centro Cultural Matucana 100 ¿CUÁNTO? Entrada liberada MÁS INFORMACIÓN AQUÍ
SOBRE LA ARTISTA
Camila Lobos Díaz es licenciada en Arte de la Pontificia Universidad Católica de Chile (2013) y Magíster en Escultura de Slade School of Fine Art, University College London (2019). Su trabajo, principalmente tridimensional, se orienta a hacer visible el contexto socio-político-cultural. Al explorar la relación entre el poder y la visibilidad, su investigación se instala en la intersección entre arte y geografía humana, donde cobran urgencia la periferia, la marginalidad y la invisibilidad en los procesos globales vinculados a la migración, los centros de poder y los costos del progreso en países menos desarrollados.
Ganadora de la beca FONDART del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio en múltiples ocasiones, también ha sido premiada en instancias como: Premio Municipal Arte Joven en la categoría Instalación 2018 (CL); Slade Bursary 2017 (UK); Premio de Arte y Tecnología Matilde Pérez, Fundación Telefónica 2013 (CL); Premio de Arte LENOVO 2012 (CL). En 2017 recibió la beca Yitzhak Danziger Scholarship para el desarrollo de sus estudios de Magíster en Slade School of Fine Art.
Camila ha sido seleccionada como artista en residencia en Carpintarias Sao Lazaro Lisboa (2020, Portugal) y ganadora del Gulbenkian Grant de la Fundación Calouste Gulbenkian. En 2020 obtuvo una residencia en el Centro Berlin Sessions en Berlín, 2020 (AL). En 2019 fue comisionada por Tate Modern Museum (UK) para desarrollar una edición especial de tarjetas de navidad. En 2017 fue comisionada por el programa Santiago es Mío y el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes (CL) para crear el proyecto de arte público “El lugar de la visibilidad”. Premiada por la Academy of Fine Arts Vienna en 2016, realiza allí su programa de residencias artísticas.
Su trabajo ha sido expuesto individual y colectivamente en espacios como: Museo de Arte Contemporáneo (CL), Museo de la Memoria y los Derechos Humanos (CL), Fundación Telefónica (CL), Galería BECH (CL), Facultad de Artes ASAB Universidad Distrital de Bogotá (CO), Kunstraum Niederösterreich Museum (AT), Gallery Schleifmühlgasse 12-14 (AT), 12na Bienal de La Habana (CU), L.A. Art Show (USA), Woburn Research Centre (UK), Creekside Gallery (UK) y Hinterland Galerie (AT).